Al diseñar soluciones de señalización digital al aire libre, seleccionar la relación de pantalla y el tamaño de la pantalla correctos es fundamental para garantizar una visibilidad óptima, eficiencia energética y durabilidad a largo plazo. La relación de pantalla más común en las pantallas LCD modernas al aire libre es de 16:9, lo que se alinea con los estándares de contenido de pantalla ancha utilizados en los sistemas de radiodifusión, publicidad e información pública. Esta relación de aspecto ofrece una excelente compatibilidad con los formatos de vídeo HD y 4K, lo que lo hace ideal para la entrega de contenido dinámico en entornos como tiendas minoristas, centros de transporte y centros deportivos.
Los tamaños de las pantallas van desde unidades compactas de 10,1 pulgadas, a menudo usadas en quioscos o pantallas montadas en vehículos, hasta paneles masivos de 110 pulgadas desplegados en instalaciones de publicidad al aire libre a gran escala. Por ejemplo, una pantalla de 13,3 pulgadas puede ser adecuada para una aplicación híbrida interior-exterior como un monitor del vestíbulo de un hotel, mientras que una pantalla de 55 pulgadas o más grande es típicamente necesaria para áreas de alto tráfico como plazas de la ciudad o entradas de estadios. Cada tamaño debe evaluarse no solo por las restricciones del espacio físico sino también por la distancia de visión y las condiciones de luz ambiental. Las normas de la industria como IEC 62305 (protección contra rayos) e IP65/IP68 (resistencia al polvo y al agua) se vuelven cada vez más importantes a medida que aumenta el tamaño de la pantalla debido a una mayor exposición a los factores de estrés ambientales.
Fabricantes como LG, Samsung y NEC producen LCD calificados al aire libre con niveles de brillo que superan los 5.000 nits, una necesidad para la legibilidad diurna bajo la luz solar directa. Estas pantallas a menudo cuentan con recubrimientos antirreflejos, ángulos de visión amplios (≥178 °) y carcasas robustas diseñadas para temperaturas que van de -30 ° C a +60 ° C. Al instalar una unidad de 43 pulgadas o más al aire libre, la gestión térmica a través de disipadores pasivos o enfriamiento activo se vuelve esencial para prevenir el sobrecalentamiento durante los picos de verano. Además, debe considerarse el consumo de energía: las pantallas más grandes consumen más energía, por lo que elegir modelos con retroiluminación LED con control de brillo adaptativo puede reducir significativamente los costos operativos con el tiempo.

Los estudios de caso muestran que las pantallas de 21,5” y 27” son ampliamente adoptadas en proyectos de ciudades inteligentes urbanas para actualizaciones de tránsito en tiempo real y alertas de emergencia, mientras que las unidades de 65” a 86” dominan entornos comerciales como centros comerciales y aeropuertos donde los visuales que atraen la atención son cruciales. Para instalaciones ultra grandes como carteles publicitarios o escenarios de eventos, las pantallas de 98” y 110” ofrecen experiencias inmersivas, pero requieren estructuras de montaje especializadas y sistemas de control en red para la reproducción sincronizada de contenido en múltiples unidades.
En última instancia, la elección del tamaño de la pantalla y la relación 16:9 debe equilibrar el impacto estético, el rendimiento técnico y el presupuesto. Los profesionales deben consultar las hojas de datos del fabricante, realizar evaluaciones de iluminación en el sitio y verificar el cumplimiento con las certificaciones regionales antes del despliegue.
